El sábado estuvimos en un Scape Room en Estepona. Sin duda un plan que hay que repetir. Pudimos comprobar las habilidades de Bruno para resolver acertijos, la elasticidad de José María para meterse por cualquier hueco, la serenidad de Gonzalo ante los retos, la puntería de Guille y la sangre fría de Antón ante la presión.